La gingivitis es una de las enfermedades de las encías más frecuentes y, afortunadamente, también una de las más tratables si se detecta a tiempo. Se manifiesta con encías inflamadas, sangrado al cepillarse, mal aliento persistente y, en algunos casos, sensibilidad al tacto. Estos síntomas, aunque comunes, suelen ser ignorados hasta que el problema avanza, dificultando la salud oral y afectando la estética y funcionalidad de la sonrisa.